El reloj de la estación, marca las ocho y cuarto pasadas. Te has ido, y creo que no te he dicho te quiero, las veces suficientes. Lo noto, porque me bullen en el pecho esas palabras, como mariposas aleteando descontroladas. Y me duelen. También creo que no fuiste mía, bastantes veces. A los días, les han faltado horas para amarte. Y las noches, han pasado demasiado rápidas. Así lo siento, porque ardo en deseos de ti, aún. En este instante. Y me quema en el estómago, estas ansias no saciadas. Creo que no he prendido de tu pelo, las veces suficientes los rayos de esa luna que nos ha acompañado, este fin de semana. Por más que he tratado de hacer y de decir. Por más que he intentado vivirte en cada momento. Por más que he querido hasta beberte, me he quedado con la sensación de que no ha sido suficiente. Me ahogan, todos los te amo en la garganta, a pesar de los cientos de veces que te lo dije en susurros, a gritos y a gemidos. Sé, que el momento de partir llegaría. ...
Este es mi lugar, dónde las letras cambian mi mundo y me daré por satisfecha si mientras lees, cambio el tuyo. Sé bienvenido.